Violencia de género

83 días sin despacho.

25 de noviembre

Día Internacional de lucha contra la violencia de género

Ayer escuché en la radio la noticia de que se habían producido dos nuevas muertes de mujeres a consecuencia de lo que se ha dado en denominar eufemísticamente “violencia de género”, que no deja de ser ni más ni menos que expresión del más puro machismo, que parece que nuestra sociedad no consigue erradicar.

Acabar con esta plaga requiere, entre otras cosas pero primordialmente, de una EDUCACION EN LA IGUALDAD que debe darse desde la cuna, y que es (o debería ser) materia de la asignatura de Educación para la Ciudadanía (no impartida en inglés, como ha pretendido el PP de la Comunidad Valenciana, solo por joder hacer oposición al Gobierno de España)

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Iba a hablar de la violencia de género, pero sin salir del ámbito de nuestro municipio; lo que pasa es que una cosa lleva a la otra, y…

Resulta que hace ya muchos meses, una concejala de nuestro Grupo tuvo conocimiento de un episodio de este tipo acaecido en Alpedrete, (por fortuna, no mortal) y se le ocurrió (porque es su obligación) indagar cómo se enfrenta nuestro Ayuntamiento a estos casos.

La primera pregunta, obvia, que se hizo a sí misma es si existía en nuestro pueblo un protocolo de actuación ante estos hechos, en poder de la Policía Local, de los Servicios Sociales y, en fin, de todos los actores que intervienen (o deberían intervenir) cuando se denuncia uno de estos episodios de violencia.

Dirigió un escrito al Equipo de Gobierno, solicitando que, si existía dicho protocolo, se le facilitara una copia del mismo.

Cuando llegó el siguiente Pleno, con su escrito en la inopia (o sea, no respondido) aprovechó el punto de control a los órganos de gobierno para preguntar verbalmente sobre dicha cuestión.

La respuesta de la señora concejala del área fue que “por supuestisísimo, existía ese protocolo, y era ampliamente conocido por todos los llamados a intervenir ante un suceso de violencia machista”.

Nuestra compañera quiso saber entonces por qué no se le había entregado, y la respuesta fue que “estaba esperando a que se lo enviaran los técnicos de la T.H.A.M. (1) a quienes lo había solicitado”.

A ver cómo se come esto: existe un protocolo ¿no? Una copia del mismo está en poder de la Policía Local, así como de todos los entes que deben intervenir en estas circunstancias, ¿cierto? Y si esto es así, ¿por qué hay que solicitarlo a la T.H.A.M.?

A alguien puede que le esté creciendo la nariz, y no tiene carnet del PSOE precisamente.

Por cierto, el escrito continúa en la inopia a fecha de hoy.

(1) T.H.A.M. Iniciales de los nombres de los municipios que constituyen la mancomunidad de Servicios Sociales (Torrelodones, Hoyo de Manzanares, Alpedrete y Moralzarzal) En ocasiones como ésta, suele ser utilizada como pantalla o excusa por el PP de Alpedrete para ocultar sus carencias, o para desviar su responsabilidad.

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Lo que sigue no tiene nada que ver con la violencia de género.

Corría el mes de septiembre de 2007. Hasta junio de ese año, había cuatro trabajadoras en nómina del Ayuntamiento, como “auxiliares de jardín de infancia”. Para quienes no lo sepan, estas “auxiliares” tienen encomendada la importante labor de atender a los más pequeñines, en los colegios públicos de infantil y primaria, en todas aquellas cosas que exceden las competencias de los docentes (por ejemplo en su higiene personal, ya me entendéis) Sus contratos finalizaban en junio, y se volvían a firmar con el inicio del curso.

Podríamos entrar a discutir si mantener estos puestos de trabajo debe ser cosa del Ayuntamiento, pero no es el momento. Para no dejarlo en la inopia, diré que en mi opinión no, que es la Comunidad de Madrid -quién tiene trasferidas las competencias en Educación- la que se debería hacer cargo del coste de ese servicio, no los Ayuntamientos. Pero como la Comunidad de Madrid no lo paga, y el servicio hay que prestarlo, pues Alpedrete (como otros municipios) tiene que rascarse el presupuesto.

Bien, pues cuando en septiembre de 2007 las cuatro trabajadoras acudieron a Personal a preguntar, extrañadas de que no se les hubiera llamado para firmar el contrato como otros años, les respondieron que no iban a ser contratadas.

La razón era que el Equipo de Gobierno había solicitado al I.N.E.M. un convenio por el cual este Organismo paga a trabajadores en paro, ahorrando estos costes a la entidad local que lo solicita, (al Ayuntamiento de Alpedrete, en este caso) Realmente no es ahorro, sino traspaso del gasto de las cuentas del Ayuntamiento a las de la Comunidad, porque al final el dinero sale de los mismos bolsillos, los nuestros. Pero a nuestra señora Alcaldesa le encanta decir que “ha conseguido que x o z le salga gratis a Alpedrete”.

La cosa sufrió distintas vicisitudes a lo largo del curso. Finalmente, se contrató a una empresa (¡) para que prestara el servicio.

Tres de las cuatro trabajadoras, ante esto, recurrieron a los tribunales. La cuarta no, (respeto absolutamente su elección) así que el Equipo de Gobierno la “premió”, contratándola para el colegio de Los Negrales, como ejemplo de lo que sucede cuando eres bueno, y de lo que te espera si eres malo.

Tuvo lugar la vista y se dictó sentencia, que daba la razón a las trabajadoras, condenando al Ayuntamiento a su inmediata incorporación y alta retroactiva en la Seguridad Social, así como al pago de los salarios dejados de percibir.

El Equipo de Gobierno intentó recurrir, pero la jueza exigió previamente a su admisión el cumplimiento de la sentencia. Y cómo al Equipo de Gobierno no le salió… de las actas de concejal, el recurso decayó, y la sentencia devino en firme.

Por no alargar la cosa: durante varios meses se les entregaron o presentaron a la firma por Personal certificados erróneos, contratos que no había por donde coger, etc. hasta que finalmente, el pasado mes de julio, la oposición municipal en bloque solicitó la convocatoria de un pleno extraordinario, para tratar el asunto (entre otros, relativos también a la política de personal del Equipo de Gobierno)

La correspondiente proposición de acuerdo, que trataba de imponer el inmediato cumplimiento de la sentencia en todos sus términos, fue votada en contra por el PP, alegando para ello que “ya se había cumplido”. Aunque las trabajadoras no habían visto un euro, y su fecha de alta en la Seguridad Social, al menos el viernes anterior al pleno (se celebró un lunes) era de junio de 2008, no de septiembre de 2007.

Todo esto se regularizó a toda prisa, pasaron las vacaciones, y llegó septiembre de 2008.

Entonces Personal les presentó a la firma un nuevo contrato, con una de sus clausulas redactada en tales términos, que dejaba a discreción del Ayuntamiento su despido en cualquier momento.

Las trabajadoras se incorporaron, cobraron sus nóminas… sin contrato, que obviamente se habían negado a firmar.

Ahora quieren reducirles dos horas diarias su jornada laboral, (y con ellas su salario) ya se lo han comunicado por escrito.

Lo que decía al principio: esto no tiene ninguna relación con la violencia de género, aunque hay mucho rojo gente mala por ahí que podría pensar…  cualquier cosa. Por ejemplo, que se trata de acoso laboral.

Parece que el asunto volverá a los Tribunales de lo Social y, como el número de horas lectivas en los colegios no ha disminuido, lo más probable es que el Ayuntamiento vuelva a perder el juicio, y van ya…

¿Tendremos que solicitar otro pleno?

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La situación de inopia (primera y segunda acepciones de la palabra en el diccionario de la R.A.E.) en la que nos encontramos los concejales de la oposición tiene consecuencias indeseadas.

Y es que después de la tira de tiempo sin información, desde el viernes a hoy un servidor ha presentado en el Registro nada más y nada menos que 23 instancias, solicitando copias de facturas o escritos recibidos en o enviados por el Ayuntamiento. Y por lo que he visto, la “producción” de mi compañero de inopias de IU-LV, ha sido similar.

Esto supone una carga de trabajo desusada para los funcionarios, lo comprendemos y lo lamentamos. Pero la culpa no es achacable a nosotros, sino a persona o personas desconocidas (quien nos haya tenido tanto tiempo sin información) Porque nosotros solo estamos realizando (como podemos y nos dejan) la tarea que con sus votos encomendaron a la oposición 3.130 vecinas y vecinos.

¿No sería más lógico que los datos se nos entregaran, por ejemplo semanalmente, para evitar estas avalanchas?